Contribuyendo al ejercicio del derecho a la alimentación de la población refugiada Saharaui
Desde 1993, el Movimiento por la Paz -MPDL- realiza distribuciones de ayuda humanitaria (alimentos, cocinas, jaimas y material de higiene entre otros) para poder cubrir las necesidades básicas de la población que reside en los Campamentos de Población Refugiada Saharaui situados en la región argelina de Tindouf.
En la hamada Argelina continúan viviendo desde hace 40 años más de 125.000 personas a la espera de que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas resuelva el litigio de soberanía existente sobre el Sáhara Occidental. Mientras tanto, la condición de refugiados en un país ajeno les imposibilita generar los recursos necesarios para poder desarrollarse de forma autónoma. Por este motivo, para poder acceder a la alimentación, salud, educación y al resto de servicios básicos, la población saharaui depende enteramente de la Ayuda humanitaria internacional.
La salud nutricional de la población saharaui, amenazada
Con motivo de la reducción incesante de fondos destinados a atender esta situación de emergencia crónica, la salud nutricional de la población saharaui se está viendo seriamente afectada y las expectativas del Programa Mundial de Alimentos no son nada alentadoras para este año 2016. Desde el pasado 1 de mayo de 2016, el Movimiento por la Paz con el apoyo económico del Fons Catalá de Cooperacció han activado una línea presupuestaria de emergencia para contribuir a paliar esta situación de extrema vulnerabilidad y, coincidiendo con el comienzo del mes sagrado de Ramadán, se ha iniciado el reparto de 875 mil huevos frescos entre los 125 mil refugiados que habitan actualmente los campamentos saharauis.
Una vez terminado el periodo estival de verano y reiniciado el curso escolar se distribuirán aproximadamente 150 mil huevos frescos más para los comedores escolares y así poder atender a uno de los colectivos más vulnerables entre cualquier grupo de población refugiada como son los niños.
Con esta iniciativa el Movimiento por la Paz, además de contribuir al derecho a la alimentación de la población refugiada saharaui, apoya también el tejido económico local y la sostenibilidad del proyecto productivo del Centro de Producción Avícola Hussein Tamek, situado dentro de los campamentos bajo gestión saharaui y que emplea a más de una veintena de personas.